quinta-feira, 31 de março de 2011

¿Qué es un glosario?

 Concepto:
                                                 
Se llama glosario al conjunto de glosas, que son anotaciones que tratan de explicar palabras de difícil comprensión contenidas en un texto, pudiendo tratarse del conjunto de palabras técnicas utilizadas en determinadas ciencias, como glosario de términos médicos, jurídicos, de ingeniería, etcétera.
Los primeros diccionarios surgieron como glosarios, acumulación de palabras oscuras, y sus significados sobre un texto determinado. Es frecuente actualmente hallar un texto, que a su término contenga bajo el título de glosario, un diccinario de palabras de uso poco frecuente y su significado. Es entonces un diccionario pero que se limita a transcribir las palabras que el autor considera que pueden ser desconocidas por el lector, a veces por pertenecer a otros idiomas, o al lunfardo, o al castellano antiguo.
El profesor de gramática de la escuela de Bolonia, llamado Irnerio, durante el siglo XI, se dedicó al estudio de las leyes que le permitieran defender al Papado, frente a los poderes del emperador en la llamada “Querella de las Investiduras”. Para ello estudió la colección de jurisprudencia contenida en el Digesto del emperador Justiniano, por él descubierto, desde el punto de vista filológico, convocando a numerosos juristas, que conformaron la escuela de los glosadores.
De manera totalmente ahistórica, los glosadores, se dedicaron a realizar glosas sobre los textos, o sea anotaciones del significado de palabras oscuras, que colocaban entre líneas (glosa interlineal) o de un concepto entero, cuyo significado ponían al margen (glosa marginal). El conjunto de esas glosas (glosario) recopiladas por Francesco Accursio Fiorentino, se llamó Glossa Magna.

Fuente: http://deconceptos.com/lengua/glosario
Postado por: Letícia Lima




Conceptos: Laísmo, Leísmo y Loísmo.


Laísmo El laísmo es el uso de los pronombres personales "la" y "las" en función de objeto indirecto para referentes del género femenino en lugar de las formas estándar "le" y "les". En ciertos dialectos del español el laísmo es un fenómeno extendido.

La lengua castellana mantiene la antigua declinación latina y uso de los casos latinos en los pronombres personales y la evolución de la lengua castellana tiende a la eliminación total de los casos latinos, reflejo que tenemos en la tendencia a suprimir la diferencia de funciones entre el complemento directo y complemento indirecto por medio del género.

Esto se traduce en el uso de "la" y "las" en función de complemento (objeto) indirecto; cuando el referente es femenino en vez de "le" y "les".

Cuando un "laísta" dice: La pegué, un no "laísta" entiende que "la cosa" referida fue pegada (con un adhesivo) y no "golpeada", que es lo que el "laísta" quería decir.

El "le" indirecto es ambiguo; para quitar la ambigüedad utilizamos un segundo pronombre con preposición: Dale un beso, a ella (a él).

La Real Academia de la Lengua Española condenó el laísmo en 1796.

El laísmo es frecuente en el dialecto madrileño: A ella, la dolía la cabeza (en lugar de: A ella, le dolía la cabeza).

El laísmo también es frecuente en Castilla y León, sobre todo en la provincia de Palencia. Asimismo es utilizado en Santander capital y sus alrededores.


LeísmoEl leísmo es la sustitución del pronombre personal lo/la por le en la posición de complemento directo y en los verbos que tradicionalmente rigen el caso acusativo (también llamados verbos transitivos) en español:

(Forma leísta) Juan le ha visto.
(Forma estándar) Juan lo ha visto.

El leísmo es un rasgo característico de los dialectos del centro de la península Ibérica, a las que la Real Academia Española considera actualmente vulgares. El dictamen académico se ha moderado recientemente, y se considera aceptable la forma leísta exclusivamente cuando el complemento directo de la acción es una persona de sexo masculino. Por tanto, así le ví (a Juan) se tolera, mientras que le ví (a Inés) o le vi (al buque) no. En el caso de ser el complemento directo masculino y plural, referido a personas, la Academia hace notar que aunque el uso de les "no carece de ejemplos literarios", es "desaconsejable en el habla culta"; por tanto, decir *les vi llegar (a ellos) es desaconsejable y, por supuesto, les vi llegar (a los buques) ya es incorrecto sin paliativos.

La posición oficial de la Academia ha variado con las épocas; durante el siglo XVIII la tendencia a la unificación de los casos era dominante, y de hecho en 1796 la Real Academia dictaminó que el pronombre átono debería usarse para el acusativo masculino con exclusión de lo. No sería hasta 1854 en que la doctrina se revertiría; atendiendo a una propuesta de Vicente Salvá, se reintrodujo la distinción entre el lo usado para el acusativo y el le dativo. En una primera instancia se reconoció simplemente la legitimidad de la distinción entre pronombres y luego prescribiéndola explícitamente. Para fines de siglo, el dictamen de 1796 se había invertido por completo, y el uso de le se consideró incorrecto, aunque con la salvedad de aceptar el leísmo para el pronombre masculino singular, diciendo que:

...nunca o rarísima vez convendría el "le" acusativo a pronombre de cosa.

El criterio para las rarísimas veces se explicitó poco y mal. Posiblemente a causa de ello, la decisión académica alteró paulatinamente el uso escrito en las regiones no distinguidoras, que por fuerza fueron adecuándose a las normas de la RAE.


LoísmoEl loísmo es una peculiaridad de ciertos dialectos del español que consiste en la sustitución del pronombre personal "le" (que representa generalmente al objeto indirecto) por "lo" (que se reserva, en dialectos no loístas, para el objeto directo). Desde el punto de vista del español normativo la Real Academia Española condenó el loísmo en 1874 y lo reconoce como un vulgarismo, por lo que no es correcto el uso "loísta" en español normativo.

A veces cambia el significado de las frases: Cuando un "loísta" dice "Lo pegué", un no-loísta entiende que "la cosa" referida fue pegada (con un adhesivo) y no "golpeada"—que es lo que el "loísta" quería decir. Para saber si un complemento antecedido por la preposición "a", es indirecto se debe reemplazar por "para"; entonces, si el sentido de la oración sigue siendo el mismo, el complemento es indirecto. En un caso contrario, es complemento directo.

La lengua castellana mantiene la antigua declinación latina y uso de los casos latinos en los pronombres personales, a pesar de la evolución de la lengua castellana hacia la eliminación total de los casos latinos, reflejo que tienen algunas personas en la tendencia a suprimir la diferencia de funciones entre el complemento directo y complemento indirecto por medio del género.

Esto se traduce en el uso de "lo" y "los" en función de complemento (objeto) indirecto; cuando el referente es del género masculino en vez de "le" y "les". Se produce por paralelismo con el laísmo: "la" y "las" para el género femenino; "lo" y "los" para el género masculino. El "loísmo" es un fenómeno paralelo al laísmo y al leísmo pero mucho menos habitual, puesto que las entidades a las que según la norma laísta/leísta refiere el pronombre "lo" raramente toman el papel semántico habitualmente asignado al objeto indirecto. Un ejemplo sería "a lo que dijiste "lo" pude haber dado más relevancia, pero no lo hice".

El "le" indirecto es ambiguo; para quitar la ambigüedad se utiliza un segundo pronombre con preposición: "Dale un beso, a ella (a él)".

¿Qué es sociolingüística?

La sociolingüística cuantitativa urbana o variacionismo se ocupa principalmente del estudio de la variación lingüística y del cambio lingüístico. Estudia las distintas variantes lingüísticas que se dan en grupos humanos separados por ciertas variables sociales como la religión, el nivel educativo, el nivel socioeconómico, la profesión, la procedencia, la edad, el sexo, etc. Del mismo modo que una lengua presenta variedades conocidas como dialectos en las distintas regiones en que se utiliza, también el uso de la lengua cambia de un grupo social a otro; estos sociolectos son objeto de estudio de la sociolingüística. Cuando la variedad va unida a una cultura determinada se denomina etnolecto. La utilización de esas variedades lingüisticasclases sociales o socioeconómicas, aunque un mismo individuo puede utilizar diferentes variedades de la lengua de acuerdo con la situación social y el contexto en que tenga lugar la interacción. puede servir para categorizar a los individuos en
La sociolingüística sincrónica se centra en la estructura sociolingüística y en las variaciones lingüísticas que dependen de las situaciones y de las actitudes de los hablantes; la sociolingüística histórica o diacrónica, por su parte, se ocupa del cambio lingüístico y de la adquisición y difusión de las lenguas.

Entre los sociolingüistas internacionales se puede mencionar a William Labov (considerado por algunos como el padre de la disciplina),Dell Hymes,  Basil Bernstein, y Deborah Tanner. En español, cabe destacar al profesor de laUnivesidad de Acalá de Henares, Francisco Moreno Fernández y al sociolingüista contemporáneo, el chileno Héctor Muñoz Cruz adscrito a la Universidad Autónoma Metropolitana de México.

Fontes: ALMEIDA, Manuel (1999), Sociolingüística, editorial Servicio de publicaciones Universidad de la Laguna.

Mi concepto:
En suma, la sociolingüística es la rama que estudia los distintos aspectos de la sociedad, como las normas culturales y el contexto en que se desenvuelven los hablantes, o sea,  en lo medio que viven, esto anfluyen en el uso de la lengua; la sociolingüística se ocupa de la lengua como sistema de signos en un contexto social. Se distingue de la sociología del lenguaje en que esta examina el modo en que la lengua influye en la sociedad.

 

postado por: Leticia Lima

quarta-feira, 30 de março de 2011

¿Qué es un portafolio de lenguas?

El portafolio es un documento personalizado, de propiedad de cada alumno diseñado para crearles la rutina de registrar el proceso de aprendizaje que siguen en la adquisición en las distintas lenguas y culturas con la que están en contacto.
Este documento le servirá para anotar sus avences, marcarse nuevas metas, reconocer cómo y cuándo aprende dentro e fuera de la facultad, reflexionando sobre sus experiencias personales y valorando sus progresos, en suma este documento se convertirá en el testimonio de todo su proceso de aprendizaje.
El portafolio le ayuda a participar de forma activa e consciente de su aprendizajes, de todo lo que contribuye al enriquecimiento y a la diversificación. También ayuda a generar los procesos de adquisicíon y de formación en los que se ve envuelto el aprendiz, y a orientar mejor sus motivaciones y sus deseos. En suma, es una ayuda para la mejora de su autoestima, apoyar su autonomía y potenciar el desarrollo de estrategias de aprendizaje.


Postado por: Leticia Lima
referencias:www.edupa.uva.es
clase del dia: 09/02/2011

Clases

Voy a publicar aquí todas las clases de mi curso de Español y Literatura en el Instituto Federal de Roraima,publicando todos los días a todos, "mi pequeño grande mundo español".